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Subasta 664, Lote # 110 JOSÉ CLEMENTE OROZCO
Desnudo
Firmado.
Óleo sobre tela sobre fibracel.
(N. Zapotlán actual Ciudad Guzmán, Jalisco, 1883 - Ciudad de México, 1949)
Orozco ha pintado la vida del pueblo mexicano en los aspectos más trágicos, más íntimos, más altos. Nació del pueblo en una pequeña población constantemente invadida por la ciega y remota presencia del arte prehispánico. En Orozco se siente esta presencia -fénix perpetuo- que da intensidad y valor al arte nuestro: está en la época misma, alimentándose de ella, como un árbol en la tierra mexicana histórica.
Su pintura -mezcla de humor y angustia, agresividad y ternura- la ha colocado más allá de la Revolución Mexicana: en el drama del hombre. Su obra no está construida en razón de presente, sino en razón de eternidad. Tal es la orgullosa humildad de su decoro. Y por ello se yergue a veces como las grandes obras primitivas. No exalta a la masa servilmente: tranquilo en su soledad, lo vemos señorear las modernidades transitorias. Su creación no es revolucionaria porque en algunos motivos esté viva la lucha revolucionaria, sino por trascender tales motivos y llegar con originalidad hasta la entraña del hombre.
"Orozco fue el primer gran pintor mexicano que se acerca al pueblo." David Alfaro Siqueiros.
Véase: CARDOZA Y ARAGÓN, Luis. "Pintura Contemporánea de México." México. Ediciones Era, 1988.
47 x 35.5 cm
Estimado $400,000-500,000
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